Innovación: base para educar a la siguiente generación

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Los nuevos modelos educativos deben estar configurados para ser un facilitador del aprendizaje significativo: conocimiento que ayuda al desarrollo de la vida diaria. 
Según el INEGI, la generación Z representa cerca del 15% de la población del país y sus tendencias de consumo han cambiado, debemos adaptarnos a ellos, debemos innovar.
A través de una interfaz en la cual se puede administrar la interacción, así como analizar los patrones de aprendizaje, Enova ha alcanzado más de un millón y medio de personas, las cuales, en su mayoría, son población de bajos recursos y con poco acceso a la tecnología, todo a través de un modelo mixto de aprendizaje significativo.
El nuevo reto, además de llegar a quienes más lo necesitan, es alcanzar a los más jóvenes a través de nuevas estrategias de aprendizaje que involucren a las nuevas tecnologías y tomen en cuenta el particular perfil de la generación Z.
De acuerdo con nuestro experto, Raúl Maldonado, “México es un país que le gusta adoptar las innovaciones, seguirlas e implantarlas, sin embargo y sin pasos agigantados cada vez salen a la luz jóvenes mexicanos con lanzamientos de nuevos proyectos de innovación donde las instituciones de educación pública y privada apoyan diferentes modelos de innovación que provocan que los estudiantes busquen crear sus propias innovaciones en distintas áreas para apoyar en la resolución de problemas de la vida cotidiana”.
¿Quiénes son la generación Z?
En 1995 nació una nueva generación: los nativos digitales o generación Z, hoy rondan entre los 10 y los 21 años. Esta nueva generación se comunica y consume muy diferente a la generación X (1970-1985) o la generación Y/Millenials (1986-1994), nacieron con tecnología, aprenden a través de la tecnología, su mundo está basado en ella.
Con este reto de frente, y con las generaciones X y Y como las responsables de su educación, es importante sentar las bases para alcanzar a las nuevas generaciones: innovando.
¿Cómo aprende la generación Z?
“La característica principal de las nuevas generaciones es la flexibilidad, la conectividad y las sociedades del conocimiento integradoras”, según Raúl Maldonado, CEO & Product Strategis en Enova.
Debido a su alta exposición a dispositivos conectados a internet, estos jóvenes tienden a ser autodidactas y aprender a través de plataformas; son mucho más sociales, pero a través de internet.
Son aún más colaborativos que la generación Y, y no les es suficiente sentarse en un salón de clase a escuchar una cátedra tradicional, su educación debe estar complementada con actividades fuera, vía on-line: siempre están conectados.
Son emprendedores por naturaleza, así que están preparados para los retos y su resolución, también poseen una mayor madurez intelectual debido a su sobreexposición de contenido al alcance de un clic.
Se debe tomar en cuenta que la inmediatez a la que viven expuestos en todo momento provoca
también que su concentración sea más corta y asimilan mejor la información a través de la imagen que del texto. Hacen más de una cosa a la vez, pero les cuesta trabajo escuchar.
Aprendizaje significativo y sus estrategias
Con la ambición de alcanzar a esta generación que representa cerca del 15% de la población mexicana, y que están en plena formación educativa, es importante que se tome en cuenta el avance de las tecnologías como un habilitador para alcanzarlos.
De acuerdo con la UNESCO, las sociedades del conocimiento deben apoyarse en cuatro pilares: la libertad de expresión, el acceso universal a la información y al conocimiento, el respeto a la diversidad cultural y lingüística, y una educación de calidad para todos.
Estas nuevas generaciones y sociedades tecnológicas impulsan, a través del aprendizaje significativo, mayores avances en el conocimiento, el crecimiento de la economía y logran que los individuos se desarrollen con mayor éxito en los diferentes retos del día a día.
El nuevo deber es adaptarse a las nuevas generaciones si queremos otorgarles educación de calidad y aprendizaje significativo. Para ello, Enova sostiene que la creación y uso de plataformas tecnológicas democratizadas son la respuesta para sostener un buen nivel de educación.
Para la generación Z la educación tradicional puede ser aburrida o tediosa, algunas estrategias para innovar en la forma en que se educa son:
1)      Gamificación: pasar de lo teórico a lo práctico a través de plataformas tecnológicas de juego que ayuden a los jóvenes a desarrollar el pensamiento crítico y racional con menos texto.
2)      Redes sociales: más allá de una estrategia, las redes sociales coadyuvan tanto al educador como al educando a desarrollar actividades sociales y colaborativas que se pueden integrar a plataformas on-line de cursos y talleres.
3)      Recursos interactivos: sumado a las plataformas de juegos, aquellas que integran recursos en las cuales el alumno deba prestar atención poco tiempo, pero resuelva un problema, ayuda a que desarrolle su concentración y su creatividad.
Enova tiene muy claro que la innovación es un pilar indispensable para la generación de conocimiento y desarrollo económico de México, por ello, comprende los esfuerzos y las iniciativas que tiene el Estado Mexicano para generar nuevos productos, diseños, procesos, servicios, métodos u organizaciones o de incrementar valor a los existentes, en los diferentes sectores como el social, la salud y principalmente el educativo.
Para Enova las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) están coadyuvando a mejorar la calidad de vida de los mexicanos. El poder acercar este tipo de innovaciones tecnológicas -en específico en los contextos educativos- a diferentes sectores y regiones del país de forma tangible y accesible, tiene un impacto significativo en las vidas de las personas.
Algunas cifras
·         En el mundo, Suiza ocupa el primer lugar en innovación y calidad de innovación de acuerdo con el Índice Mundial de Innovación 2016.
·         México a nivel mundial ocupa el lugar 61 en el ranking que evalúa a 128 países, sin embargo, ocupa el 3er lugar por región en América Latina, sólo por detrás de Chile y Costa Rica.
·         Hasta hace dos años, sólo 4 de cada 10 escuelas contaban con acceso a internet, ésto incluye educación pública y privada.
·         De acuerdo con la OCDE, 15% de la población estudiantil en México pasa más tiempo en internet que las aulas.
Es tiempo de innovar, existen hoy modelos ya probados a nivel internacional en distintos niveles educativos que han confirmado que las tecnologías son un eficiente habilitador de nuevos aprendizajes, basta con mirar el nivel de innovación que desarrollan países como Suiza, Suecia, Reino Unido, EEUU y China, y su consecuente desarrollo en educación y economía.

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