Cocinar, alternativa para reducir estrés de colaboradores
- Especialistas recomiendan incorporar actividades culinarias en la cultura organizacional para atender Norma 035
- Procesar objetivos alcanzables a corto tiempo nos da placer, la cocina es altamente tranquilizadora para el cerebro y los sentidos: Eduardo Calixto
Debido a que el estrés laboral es uno de los principales padecimientos entre los trabajadores, expertos en salud y gastronomía recomiendan incluir actividades culinarias, como cocinar, para reducir los niveles de estrés y ansiedad de los colaboradores.
A partir de la aprobación de la Norma Oficial Mexicana (NOM) 035, emitida en octubre por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), las empresas mexicanas son responsables de atender los factores de riesgo psicosocial de sus colaboradores. Mejorar la cultura organizacional a través de la implementación de actividades gastronómicas es un recurso importante que podrían implementar las organizaciones para cumplir con la recién aprobada Norma Oficial.
De acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), el 75% de los trabajadores mexicanos sufre fatiga por estrés laboral, superando a países como Estados Unidos o China, mismo porcentaje que calcula el IMSS.
Los mexicanos somos los que más horas al año trabajamos en el mundo: nada más y nada menos que 2,148, según la OCDE; después de nosotros vienen Costa Rica (2,121 horas), Corea (1,993), Rusia (1,972) y Grecia (1,956 horas).
Sobre las implicaciones de estos factores de riesgo psicosocial, Eduardo Calixto, Doctor en Neurociencias con Postdoctorado en Fisiología Cerebral, expresó:
“una persona en estrés constante sufre alteraciones en las relaciones familiares, laborales y consigo mismo”, por lo que su rendimiento productivo se reduce considerablemente.
Cocinar, amén de que se utilizan los sentidos de la vista, gusto, olfato, tacto, es una actividad muy completa, que a corto y mediano plazo puede generar una adicción en sentido positivo, porque del gusto nace en el cerebro una demanda cada vez mayor de esa actividad, en tiempo e intensidad, indicó Calixto.
Si algo nos genera placer es el procesar objetivos alcanzables a corto tiempo, y esta actividad, la cocina, es altamente tranquilizadora para el cerebro y los sentidos, agregó.
Estrés grave, ansiedad o trastornos del sueño de acuerdo al tipo de puesto, tipo de jornada laboral o a la exposición a eventos traumáticos severos, son algunos de los padecimientos contemplados en la NOM 035. En caso de que las empresas incumplan la prevención, atención y tratamiento de sus empleados, se expondrán a sanciones con multas incluso superiores a 500 mil pesos.
Al respecto, Annel Lozano, subdirectora de Wellness en la firma Lockton México mencionó:
“el estrés tiene una implicación en los padecimientos psicoemocionales, los cuales inciden de manera importante en la productividad reduciéndola hasta en un 30 por ciento”.
“México es uno de los países con peor calidad de sueño, sobre todo por las grandes distancias que recorremos hacia nuestros trabajos. Esto hace que la mayoría de las personas duerman entre cuatro y cinco horas, disminuyendo la productividad y creando el presentismo, es decir, el obrero está físicamente en su trabajo, pero mentalmente ausente”, comentó la experta.
Por su parte, Pablo Caballero, Chef Corporativo de Lyncott, empresa mexicana de productos lácteos indicó que
“Lo ideal es que cada empresa tuviera un taller de cocina, donde no sólo se desarrollan capacidades conocidas o no reveladas de los trabajadores y empleados en general, sino que, cuando se aborda en un contexto de compañerismo, mejora el ambiente laboral de la empresa”, opinó.
El Chef planteó que
“cocinar siempre está relacionado con comer, cuando los trabajadores entran en depresión, lo primero en lo que piensan es en la comida; pero más que comer, cuando estamos en situación de estrés, cocinar siempre resulta reconfortante, te olvidas de las preocupaciones”.
Eduardo Calixto expuso que “la Norma 035 habla sobre los procesos de sueño, si un individuo duerme mal, manifestara condiciones de desadaptación a sus horarios, con mayor probabilidad de ausentismo y de accidentes o incluso cambios en el control de peso y tener alteraciones en el eje metabólico.”
“Todos tenemos la capacidad de cocinar. La inventiva, los aromas, sabores y colores, son estímulos de sensaciones y emociones, y productores de bienestar y alegría en las personas. Por todo ello, cocinar es una actividad óptima frente al riesgo de estrés laboral”, finalizó.