¿Es posible una industria minera sostenible?
La minería es una parte esencial de nuestro mundo, ya que nos proporciona las materias primas que necesitamos para todo, desde la tecnología y las infraestructuras hasta los bienes de consumo. Pero también es un proceso que durante mucho tiempo ha sido objeto de críticas por su impacto ambiental.
Afortunadamente, los avances tecnológicos y en las prácticas de gestión han permitido que la minería sea más sostenible.
El impacto ambiental negativo de la minería
La minería puede tener un impacto medioambiental negativo si no se lleva a cabo de forma sostenible. Por ejemplo, puede afectar a la calidad del aire, la calidad y cantidad del agua y la salud de los ecosistemas. La minería también puede contribuir al cambio climático al emitir gases de efecto invernadero.
La calidad del aire puede verse afectada por el polvo de las operaciones mineras, así como por las emisiones de los vehículos utilizados en la minería. La gestión inadecuada de los residuos mineros también puede provocar la contaminación de los recursos hídricos. La minería también puede tener un impacto indirecto en los recursos hídricos a través de la destrucción de la vegetación, lo que provoca cambios en el ciclo hidrológico. Los cambios en el uso del suelo provocados por la minería también pueden afectar al clima local. Por ejemplo, la tala de árboles para las operaciones mineras puede provocar una mayor exposición del suelo a la luz solar, lo que reseca el suelo y aumenta los niveles de polvo.
Las actividades mineras pueden degradar los ecosistemas. Esto incluye la pérdida de hábitat y el desplazamiento de la fauna salvaje. Además, la contaminación acústica y lumínica de las explotaciones mineras puede afectar a los animales que viven cerca. El uso de productos químicos tóxicos en la minería también puede contaminar los suelos y los recursos hídricos, lo que puede tener efectos negativos en el crecimiento de las plantas y la salud de los animales.
¿Existe la minería sostenible?
Sí. Afortunadamente, en la actualidad las explotaciones mineras son más sostenibles. Esto debido a que la mayoría de las empresas mineras a nivel mundial han modificado de manera importante sus prácticas diarias para mejorar y potenciar su sostenibilidad, desde el uso de fuentes de energía renovables hasta el reciclado del agua.
Muchas compañías mineras utilizan fuentes de energía renovables para alimentar las explotaciones mineras, lo que reduce en gran medida su huella de carbono. La energía solar, la eólica y la hidráulica son opciones viables que también están utilizando para alimentar una mina. El reciclaje y buen uso del agua es otra forma en la que la industria está siendo más sostenible. El agua utilizada en el proceso minero es reutilizable o reciclada por procesos específicos lo que ahorra valiosos recursos hídricos.
Explotar una mina sostenible no sólo es bueno para el medio ambiente, también tienen menos probabilidades de enfrentarse a la oposición de comunidades y grupos ecologistas, y suelen tener costes de explotación más bajos.
Además, sus acciones también están enfocadas en el beneficio de las comunidades que se encuentran alrededor de dónde están ubicadas. Ya que actualmente existen empresas mineras que tienen programas sociales, ambientales, deportivos, de salud e incluso laborales que benefician a mayor número de personas.
La minería sostenible también puede tener beneficios económicos. Por ejemplo, puede crear puestos de trabajo en los sectores de las energías renovables y la rehabilitación medioambiental. También puede contribuir a atraer inversiones e impulsar las economías locales. Además, las prácticas mineras sostenibles pueden contribuir a mejorar la reputación de la industria minera, haciéndola más atractiva para posibles inversores y clientes.