Estudio advierte sobre greenwashing en redes sociales de parte de empresas energéticas
La organización Stop Funding Heat publicó un análisis de más de 150 estudios académicos, informes de ONG e investigaciones periodísticas sobre las grandes plataformas tecnológicas y la desinformación climática.
Según el informe, no existe ninguna política para abordar el problema del lavado verde en plataformas como Meta y Twitter.
El informe de Global Witness contiene información actualizada que indica que una empresa multinacional ha aumentado significativamente sus gastos en anuncios medioambientales para Facebook e Instagram durante los siete primeros meses de 2022, con un total aproximado de 800,000 libras. El contenido de estos anuncios versaba sobre la reducción de emisiones, el uso de vehículos eléctricos (VE) y la consecución de cero emisiones netas. Por el contrario, parece que la empresa destinó más de 3,000 millones de libras a nuevos proyectos de petróleo y gas en el mismo periodo, una cifra diez veces superior a su gasto global en energía baja en carbono (300 millones de libras).
Global Witness afirma que la publicidad digital de varias compañías viola el Código de Reclamaciones Verdes de la Autoridad de Competencia y Mercado del Reino Unido.
Las empresas con productos y servicios dirigidos a los consumidores deben comprobar si sus afirmaciones medioambientales son engañosas según la legislación británica sobre el consumidor utilizando el Código, que se publicó por primera vez en 2021. Entre las cuestiones que abarca se encuentran las declaraciones inexactas, las exageradas y las que no pueden compararse “de forma justa y significativa”.
El director de la campaña Stop Funding Heat y autor del informe, Sean Buchan, ha declarado: “Con un creciente movimiento internacional para detener el lavado verde y evitar la promoción de la desinformación climática, estas plataformas de Big Tech están en tiempo prestado”.
“Ya estamos viendo cómo algunos organismos reguladores empiezan a tomar medidas enérgicas contra el lavado verde de las grandes empresas contaminantes, mientras que varias ciudades y pueblos están prohibiendo la publicidad de productos perjudiciales para el clima. Las grandes tecnológicas tienen que poner orden en su casa y hacer frente al lavado verde y a la desinformación sobre el clima, en lugar de seguir lucrándose con ello en medio de una crisis climática.”
Anteriormente, InfluenceMap descubrió que las empresas de combustibles fósiles gastaron 9.6 millones de dólares de ingresos publicitarios en plataformas Meta en 2020, acumulando más de 430 millones de impresiones.
Un informe de Stop Funding Heat afirma que las empresas de combustibles fósiles gastaron 10 millones de dólares anuales en campañas de influencia en Estados Unidos basándose en los datos de anuncios de Meta. Según el informe, la cifra real podría ser fácilmente el doble sólo en Estados Unidos.
Para combatir el problema, el informe recomienda prohibiciones publicitarias “al estilo del tabaco” para las empresas de combustibles fósiles, los grupos comerciales y los grupos de presión corporativos.
También se recomienda una biblioteca publicitaria de acceso público donde se archiven permanentemente los anuncios de la industria de los combustibles fósiles para mejorar la transparencia y controles más rigurosos de la industria de los combustibles fósiles.
