Gobiernos de África deben actuar en materia de pobreza para el cumplimiento de los ODS
Los gobiernos africanos deben embarcarse en modelos de desarrollo innovadores e impulsados por las personas si quieren garantizar la prosperidad, la paz y la seguridad.
Según Hanan Morsy, Secretario Ejecutivo Adjunto y Economista Jefe de la Comisión Económica para África (CEPA), es probable que muchos de los Objetivos de Desarrollo Sostenible no se alcancen en 2030.
No ha habido avances en la reducción de la pobreza en el continente durante más de dos décadas debido a los choques globales. Se necesitan intervenciones sostenibles”.
En vista de ello, la CEPA organizó una mesa redonda en la 55ª Conferencia de Ministros Africanos de Finanzas, Planificación y Desarrollo Económico (COM 2023) para que los expertos intercambiaran ideas y recomendaran medidas para ayudar a los Estados miembros a reducir sus vulnerabilidades y desigualdades económicas y sociales.
En 2020, cuando la pandemia de COVID19 asoló Mauricio, el sector turístico se hundió, según Harvesh Seegolam, Gobernador del Banco de Mauricio. El gobierno ideó medidas convencionales y no convencionales para mitigar los efectos de la desaceleración, entre ellas la creación de un Banco Central de Mauricio independiente.
“El gobierno introdujo moratorias para apoyar a determinados sectores; introdujo el crédito line-up”, explicó Seegolam, añadiendo que el gobierno también creó la Mauritius Investment Cooperation, que funcionaba independientemente del banco central y contaba con auditorías independientes para asegurarse de que el dinero invertido beneficiara al banco.
Crear riqueza para la futura generación del país era el principal objetivo de la cooperación para la inversión de Mauricio, afirmó.
Shide afirmó que Etiopía se vio afectada por shocks superpuestos – Covid19, la guerra entre Ucrania y Rusia, conflictos y sequía – y que su respuesta incluyó medidas fiscales y monetarias.
Se tomaron medidas preventivas para contener el Covid19, dijo. Se aplazó el pago de impuestos, se reprogramó la devolución de préstamos bancarios, se concedió una amnistía fiscal a distintos sectores y el gobierno impulsó la producción de alimentos mediante el cultivo de más tierras y la producción de carne. Además de ampliar la línea aérea Ethiopian y los sistemas de pago digitales, se emprendieron más actividades de regadío.
El ministro de Finanzas de la República Centroafricana, Hervé Ndoba, dijo que el país ha estado luchando con la escasez de combustible y los altos costos de transporte debido a su condición de país sin litoral.
“Para hacer frente a estos problemas, el gobierno creó un puerto seco con almacenes para los importadores, y puso en marcha gravámenes aduaneros para limitar la inflación de las importaciones. “El gobierno creó una base aduanera para reducir los costes de producción y ajustó los precios de los surtidores de combustible”, afirmó Ndoba.
“Pretendemos aumentar el producto interior mediante gravámenes comunitarios. Estamos trabajando en la diversificación financiera: financiación verde, economía azul”.
Según la directora ejecutiva del Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/SIDA, Winnie Byanyima, el mayor reto para África es el acceso a los servicios financieros. Hasta la crisis de Covid19 y la guerra de Ucrania, los países se endeudaban a tipos de interés superiores al ocho por ciento (8%), mientras que los países con altos ingresos lo hacían a tipos tan bajos como el uno por ciento (1%).
Los elevados costes de endeudamiento de África le impiden alcanzar sus ODS. Además, la dificultad de obtener préstamos en la propia moneda del país subraya el hecho de que los países reciben un trato desigual en cuanto al acceso a préstamos asequibles.
A medida que nos acercamos a la cumbre de los ODS en septiembre, el debate sobre la financiación para África es crucial, dijo Byanyima, añadiendo que los países necesitan abordar los altos costes de la deuda, conectar la financiación con el logro de los ODS, y presionar para que África sea incluida en el G20.
Según Antonio Pedro, Secretario Ejecutivo en funciones de la Comisión Económica para África (CEPA), se calcula que África, debido al aumento de la pobreza y las desigualdades, es ahora la región más pobre del mundo. Debido a ello, muchos países africanos están experimentando una disminución de los ingresos, un aumento de la presión sobre la deuda y un espacio fiscal restringido, todo lo cual limita su capacidad para responder a las crisis económicas.