75 años de historia de la Organización Mundial de la Salud
Las Naciones Unidas se fundaron en 1945, cuando políticos de todo el mundo se reunieron en San Francisco para redactar sus estatutos. Los representantes de Brasil y China propusieron que se creara otra organización mundial que se centrara en cuestiones sanitarias y no políticas.
Fue tres años más tarde, el 7 de abril de 1948, cuando se creó la Organización Mundial de la Salud. En ella se establecía que la salud era un derecho humano para todos, independientemente de su raza, religión, creencias políticas, situación económica o condición social, y que “para lograr la paz y la seguridad es necesaria la salud de todas las personas”.
La sede de la organización está en Ginebra (Suiza) y cuenta con seis oficinas regionales. Wafaa El-Sadr, profesor de epidemiología y medicina de la Universidad de Columbia, en Nueva York, afirma que en el futuro habrá más amenazas para la salud. Por ello, debemos esforzarnos por afrontar estos problemas como una fuerza unificada y dar prioridad a los objetivos colectivos sobre los individuales. Esta es una tarea que la OMS ha emprendido y que merece todo nuestro apoyo.
Erradicación de la viruela
Como resultado de los esfuerzos de la OMS, la viruela fue erradicada en 1980, lo que supuso uno de los mayores logros de la organización. El éxito más notable, afirma El-Sadr, fue la erradicación de la viruela, que fue la única enfermedad humana erradicada. El papel de la OMS a la hora de unir al mundo en torno a este objetivo fue vital, explica.
En escenarios de acuerdo político, la erradicación de la viruela es el ejemplo perfecto del mejor trabajo de la OMS, según Christoph Gradmann, catedrático de Historia de la Medicina de la Universidad de Oslo (Noruega). Gradmann afirma que la organización se paraliza cuando los Estados miembros no se ponen de acuerdo sobre lo que hay que hacer. “Durante la Guerra Fría, los dos bloques estaban ampliamente de acuerdo en la erradicación de la viruela como objetivo a abordar”, añade.
¿Es el ébola un fracaso?
Uno de los peores trabajos de la OMS fue el brote de ébola de 2014 en Guinea, Liberia y Sierra Leona, que duró hasta 2016. El-Sadr cree que gran parte de las críticas son fruto del desconocimiento del funcionamiento de la entidad. La organización fue criticada, entre otras cosas, por no reaccionar a tiempo para hacer frente a la situación.
Mucha gente esperaba que la OMS respondiera con contundencia al brote, pero eso está fuera de las competencias de la institución. El Sadr está de acuerdo. “La OMS no es una policía sanitaria mundial, es una organización democrática”, afirma. “Su papel es guiar la respuesta, orientar, no ir a un país para hacer frente a amenazas concretas”.
Dos viales de vacuna contra la malaria
De hecho, la OMS no tiene autoridad alguna para actuar en un Estado miembro a menos que el país solicite ayuda. A pesar de ello, Rüdiger Krech, Director de Promoción de la Salud de la OMS, explica que la organización ha introducido cambios significativos desde la epidemia de ébola. Por ejemplo, ahora depende menos de los gobiernos nacionales para obtener información crucial a la hora de responder a situaciones graves.
“Cooperamos con empresas tecnológicas que pueden informarnos de un brote antes de que el gobierno lo confirme oficialmente”. Nos dicen ‘estamos viendo a mucha gente buscando en Google síntomas de esta enfermedad’, y nosotros utilizamos imágenes de satélite de agencias espaciales que nos muestran regiones donde hay mucha gente con fiebre”, explica Krech.
Retroceso de la malaria
Una de las políticas fracasadas de la OMS fue su abandono del esfuerzo por erradicar la malaria en los años sesenta. El Programa Mundial de Erradicación del Paludismo se puso en marcha en 1955, pero aún queda mucho por hacer. Parecía prometedor, con 15 países que mostraron los primeros signos de éxito.
A pesar de ello, los casos de paludismo aumentaron en muchas regiones del África subsahariana como consecuencia de la finalización del programa. Como consecuencia del Programa Mundial, la OMS se vio al borde de la quiebra en 1969. “Los Estados miembros perdieron la confianza en la iniciativa y retiraron la financiación”, afirma Gradmann.
¿Y COVID-19?
Según algunos críticos, entre ellos el entonces presidente de Estados Unidos, Donald Trump, la OMS no había hecho lo suficiente para ayudar a los Estados miembros a hacer frente a la pandemia de SARS-CoV-2, que dio lugar a COVID-19. Aunque El-Sadr y Gradmann están de acuerdo, la OMS no desempeña esa función. “Durante la pandemia, la OMS proporcionó información y se ocupó de las tareas administrativas”, afirma Gradmann. “Los Estados miembros tenían que actuar para combatir la enfermedad”.
Corresponde a los gobiernos nacionales tomar medidas para contener la pandemia. La OMS les ofreció asesoramiento, pero las recomendaciones no eran vinculantes. En opinión de El-Sadr, la OMS se vio obstaculizada por un mundo dividido en el que las naciones defendían sus propios intereses a expensas de los demás, olvidando los principios sobre los que se fundó.
Con información de DW