Rutas de sostenibilidad hacia el cumplimiento de los ODS y compromisos 2030

Cynthia Aguilar Directora y Cofundadora Consultora Social

A partir de las últimas tendencias y normativas de sostenibilidad, muchas de las empresas mexicanas están definiendo sus aspiraciones para el 2030, tomando en cuenta la hoja de ruta nacional; es un compromiso como país, con los stakeholders y la sociedad, pero la gran pregunta es, cómo alinear los esfuerzos de la empresa con objetivos tan generales.

En Consultora Social hemos acompañado a empresas de diferentes sectores adaptando sus estrategias de sostenibilidad hacia la ruta nacional, por lo que nos gustaría compartirles nuestra experiencia.

Muchas veces los directores deciden de manera arbitraria, cómo incorporar temas ESG, sin embargo, es indispensable realizar un diagnóstico, ya que permite identificar riesgos, necesidades, potencialidades y motivaciones, que muchas veces no son evidentes. Por lo que, las Acciones Clave para definir la estrategia, son:

• Realizar un Análisis de Materialidad o de doble materialidad: diagnóstico de los aspectos ESG que más preocupan a los empleados, clientes, consumidores y proveedores.
• Después de priorizar los temas identificados, se alinean con los ODS o estándares de su sector, tomando como referencia algún marco o estándar, como los Estándares GRI (Global Reporting Initiative).

Lo anterior garantiza que todas las voces sean escuchadas, que los objetivos planteados sean coherentes con el sector y los riesgos más urgentes sean atendidos.

Ahora bien, no es suficiente con publicar el logo del ODS elegido en la web de la empresa para evidenciar que hay una alineación, se requiere informar y transparentar cómo se realiza.

Al momento de definir la estrategia a seguir, es determinante elegir los indicadores de desempeño, para mostrar el progreso hacia el cumplimiento, monitorearlos cada determinado tiempo y reportarlos según el informe elegido.

Por último, no podemos pasar por alto alinear las metas del negocio con la estrategia definida. Considerar que la sostenibilidad es un esfuerzo totalmente ajeno a los objetivos del negocio, es un error común en las empresas. La sostenibilidad también permite mejorar la eficiencia operativa, de recursos, reducir costos, incrementar la competitividad y elevar el valor generado por el negocio.