Ucrania impulsa el uso del esperma de sus militares muertos en la guerra con Rusia para que tengan hijos en el futuro

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El Parlamento de Ucrania ha aprobado una medida pionera que permite a las familias de los militares fallecidos en el frente continuar su legado a través de la procreación póstuma. Esta enmienda legislativa, adoptada unánimemente por los diputados, brinda la posibilidad de utilizar esperma y ovocitos congelados de los soldados después de su muerte, ofreciendo un rayo de esperanza a las parejas que enfrentan la pérdida de seres queridos en el conflicto.

La decisión llega tras la aprobación de una ley a finales del año pasado que permitía a los soldados congelar gratuitamente sus células reproductivas antes de ir al frente. No obstante, una cláusula de esta ley, que establecía la destrucción obligatoria de estas muestras en caso de fallecimiento del militar, generó controversia y malestar. La reciente enmienda rectifica esta disposición, permitiendo la conservación gratuita de las muestras por un período de tres años tras la muerte del militar, con la opción de extender este plazo mediante pago.

Esta legislación aborda una cuestión delicada en Ucrania, un país profundamente afectado por las pérdidas humanas debido al conflicto con Rusia. La posibilidad de tener hijos póstumos se ha convertido en un tema de gran importancia emocional y social, especialmente para aquellas familias que han perdido a sus seres queridos en la guerra. La iniciativa legislativa responde a las críticas y demandas de la sociedad, buscando ofrecer consuelo y opciones a quienes enfrentan el duelo y la pérdida.

La Lucha de Una Viuda Desencadena Cambios

La abogada Olena Babych, alzando la voz por una de sus clientas cuyo esposo había congelado su esperma antes de morir en combate, jugó un papel crucial en la promoción de este cambio legislativo. Su historia y la reacción pública que generó impulsaron a los legisladores a reconsiderar y modificar la ley para hacerla más justa y compasiva con las familias de los caídos.

Mientras Ucrania no revela cifras oficiales de bajas militares, las estimaciones sugieren un alto costo humano del conflicto. En este contexto de dolor y pérdida, la nueva enmienda ofrece un mecanismo para preservar el legado de aquellos que han sacrificado su vida, proporcionando a sus parejas una oportunidad de traer al mundo una nueva generación que simbolice la esperanza y la continuidad en tiempos de adversidad.

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