Un grupo internacional de 150 especialistas en salud ha propuesto una nueva definición médica de obesidad, que busca ir más allá del Índice de Masa Corporal (IMC), una fórmula tradicional que relaciona el peso con la altura de una persona. Publicado en la revista The Lancet: Diabetes & Endocrinological Journal, el estudio señala que el IMC es insuficiente y puede llevar tanto a diagnósticos erróneos como a omisiones importantes.
Limitaciones del IMC
Los expertos explican que el IMC no diferencia entre grasa, músculo y otros tejidos corporales, lo que puede resultar en:
- Subdiagnóstico: Personas delgadas con altos porcentajes de grasa corporal, pero sin un IMC elevado.
- Sobrediagnóstico: Individuos con gran masa muscular que podrían ser clasificados erróneamente como obesos.
“La meta es tener una definición más precisa para enfocarnos en quienes realmente necesitan intervención”, comentó el Dr. David Cummings, de la Universidad de Washington y uno de los autores del estudio.
Nueva clasificación: obesidad clínica y preclínica
La propuesta sugiere clasificar la obesidad en dos categorías:
- Obesidad clínica: Personas cuyo exceso de grasa afecta órganos, tejidos o funciones corporales, presentando síntomas como:
- Enfermedades del corazón
- Hipertensión
- Problemas hepáticos o renales
- Dolor crónico en articulaciones como rodillas y caderas Estas personas serían candidatas para intervenciones como dieta, ejercicio o medicamentos.
- Obesidad preclínica: Personas que aún no presentan síntomas evidentes, pero tienen un alto riesgo de desarrollarlos. En estos casos, se recomendarían cambios en los hábitos para prevenir complicaciones futuras.
Complementar el IMC con otras mediciones
Aunque no se propone eliminar el IMC, los especialistas sugieren utilizar medidas adicionales, como:
- Circunferencia de la cintura
- Relación cintura-cadera
- Proporción cintura-altura
Estas herramientas permitirían un diagnóstico más completo y preciso.
Un cambio en el paradigma médico
El Dr. Norbert Kushner, de la Universidad Northwestern y coautor del estudio, reconoció que esta propuesta marcará el inicio de un largo debate dentro de la comunidad médica: “Esto es el primer paso del proceso. Cambiar los criterios convencionales no será sencillo”.
La comisión detrás de esta propuesta, formada en 2022, incluyó expertos de 56 países y recibió el respaldo de 75 instituciones de salud. Su objetivo es sentar las bases para transformar el enfoque global hacia la obesidad y priorizar un tratamiento más individualizado y efectivo.



