Coca-Cola aceptó modificar los mensajes promocionales de sus botellas tras una queja legal por parte de la Organización Europea de Consumidores (BEUC) y organizaciones aliadas, quienes acusaron a la empresa de prácticas engañosas en el uso de frases como “100% reciclada” o “100% reciclable”.
La denuncia, presentada inicialmente en 2023, señaló que aunque Coca-Cola afirmaba que sus botellas eran totalmente recicladas o reciclables, en realidad componentes como etiquetas, adhesivos, tintas o tapas no estaban compuestos por materiales reciclados en su totalidad.
Ante esta situación, la empresa accedió a cambiar el etiquetado para aclarar que el contenido reciclado se refiere solo a partes específicas de la botella. Esta decisión se tomó tras un proceso de diálogo voluntario con la red de Cooperación en Protección al Consumidor (CPC) de la Comisión Europea, liderada por las agencias de Suecia y Hungría.
Agustín Reyna, director general de BEUC, celebró el anuncio pero advirtió:
“Aunque Coca-Cola aceptó matizar su mensaje, si el cambio se reduce a una nota en letra pequeña, la percepción de que la botella es totalmente reciclada seguirá presente. La realidad es que apenas poco más del 50% de las botellas de plástico se reciclan y jamás se llegará a una tasa del 100%. Estos mensajes dan una falsa sensación de inocuidad ambiental.”
Las autoridades de protección al consumidor en los países de la UE supervisarán que Coca-Cola cumpla con lo acordado. También evaluarán el cumplimiento de otras grandes embotelladoras que operan en el mercado europeo.
El caso también pone en evidencia el riesgo legal de combinar frases como “reciclable” con otros símbolos verdes o declaraciones ecológicas sin sustento, lo que podría inducir al consumidor a una idea errónea sobre el impacto ambiental real de estos productos.
Kamila Drzewicka, abogada de la organización ClientEarth, señaló:
“Este caso debe verse como un punto de partida mínimo. Las autoridades ahora cuentan con un mandato claro para actuar contra prácticas que violen estándares legales y engañen al público.”
Coca-Cola deberá también actualizar sus páginas web y redes sociales para reflejar este nuevo enfoque en su comunicación ambiental.