Durante años, Meta confió en equipos humanos para evaluar funciones con impacto en privacidad, seguridad infantil e integridad digital. Pero documentos internos filtrados revelan que la empresa pretende automatizar hasta el 90% de estos procesos. Un giro que promete eficiencia, pero plantea dudas sobre su responsabilidad social.
Eficiencia operativa vs. juicio ético
Meta argumenta que la inteligencia artificial permitirá decisiones más rápidas, liberando recursos para innovación. Sin embargo, los procesos automatizados sustituirán el criterio de expertos por evaluaciones instantáneas, incluso en áreas delicadas como desinformación y protección infantil.
La eliminación de la revisión humana implica dejar decisiones críticas a sistemas que carecen de contexto cultural, sensibilidad ética y capacidad de interpretación emocional. La velocidad podría imponerse sobre la reflexión, con riesgos difíciles de revertir.
Decisiones automatizadas, sin supervisión suficiente
Una diapositiva filtrada muestra que los ingenieros de producto —sin formación específica en privacidad— recibirán respuestas automatizadas mediante formularios. Expertos advierten que esto convierte la gestión de riesgos en un trámite técnico, sin espacio para la deliberación ética.
Aunque Meta afirma que auditará los resultados, el documento no detalla mecanismos de corrección ni protocolos de emergencia ante errores graves. El riesgo: decisiones que afectan a millones de usuarios tomadas sin matices, con consecuencias invisibles hasta que sea demasiado tarde.
¿Compromiso global o estándares flexibles?
En la Unión Europea, los usuarios estarían parcialmente protegidos por normativas como la Ley de Servicios Digitales. Pero en otras regiones, Meta aplicaría este modelo sin filtros adicionales. Esta diferencia sugiere una ética empresarial adaptable a la presión regulatoria, más que a principios universales.
El doble estándar debilita la legitimidad global del discurso corporativo de responsabilidad. La automatización crítica sin salvaguardas en países con marcos laxos podría vulnerar derechos digitales básicos.
Automatizar con responsabilidad: el verdadero reto
Automatizar no es un error en sí mismo. El problema surge cuando se eliminan controles humanos en decisiones que requieren juicio, empatía y visión sistémica. La tecnología puede apoyar, pero no sustituir, la responsabilidad ética.
Meta tiene la capacidad de establecer un modelo híbrido: IA para eficiencia operativa y supervisión humana para decisiones de alto impacto. Si lo ignora, corre el riesgo de erosionar su activo más valioso: la confianza.