La Universidad Anáhuac México llevó a cabo una jornada de reforestación en la comunidad de San Juan Yautepec, municipio de Huixquilucan, Estado de México, como parte de sus acciones de responsabilidad social universitaria. Con la participación de más de 200 voluntarios, se plantaron 450 árboles de especies nativas en un área afectada por tala y contaminación, reforzando el compromiso institucional con la sostenibilidad y la protección ambiental.
La actividad reunió a estudiantes de licenciatura y posgrado, egresados y atletas universitarios, quienes se sumaron a la iniciativa en un ambiente de colaboración y servicio. Además de la comunidad académica, la jornada contó con el respaldo del municipio de Huixquilucan y con la participación de la Brigada Cheyenne de General Motors, lo que demostró el valor de las alianzas interinstitucionales para potenciar el impacto positivo.
La reforestación no solo tuvo como objetivo recuperar un área forestal, sino también fomentar la conciencia ambiental entre los participantes. La acción permitió reforzar la importancia del trabajo comunitario y la capacidad de los jóvenes de contribuir activamente a la construcción de entornos más sostenibles.
Impacto y conciencia ambiental
La jornada incluyó actividades complementarias de limpieza y recolección de residuos sólidos para reciclaje. Con ello, se buscó no solo restaurar el espacio físico, sino también sensibilizar a los voluntarios sobre la necesidad de reducir la huella ambiental y adoptar prácticas responsables en la vida cotidiana.
La siembra de especies nativas contribuye al equilibrio ecológico, a la captura de carbono y a la regeneración de hábitats que favorecen la biodiversidad local. Estas acciones tienen un efecto directo en la calidad del aire, el cuidado del agua y la resiliencia frente al cambio climático, convirtiéndose en una herramienta eficaz para mitigar sus impactos.
Formación con propósito
La Universidad Anáhuac México ha puesto la sostenibilidad en el centro de su visión institucional, integrándola en proyectos de formación académica y en programas de servicio social. La jornada en Huixquilucan refleja su filosofía de educar líderes de acción positiva, capaces de vincular sus conocimientos con la creación de soluciones que aporten al bien común.
La iniciativa también subraya el papel de las instituciones educativas como agentes de cambio en el desarrollo sostenible. Al vincularse con gobiernos locales y con empresas privadas, la universidad logra multiplicar los alcances de sus programas y ofrecer a sus estudiantes experiencias formativas con impacto social y ambiental tangible.
Compromiso a largo plazo
Más allá de la jornada puntual, la Universidad Anáhuac México ha reiterado su intención de dar continuidad a este tipo de actividades y de mantener un enfoque estratégico en la protección del medio ambiente. Iniciativas como esta no solo generan beneficios inmediatos en el territorio, sino que también consolidan una cultura de responsabilidad social entre los estudiantes, quienes se convierten en promotores de prácticas sostenibles dentro y fuera de la institución.
En definitiva, la reforestación en Huixquilucan representa una suma de voluntades y una muestra del compromiso de la Universidad Anáhuac México con el desarrollo sostenible, la educación integral y la formación de ciudadanos capaces de incidir positivamente en su entorno.
