Durante décadas, el salario fue un tema casi tabú en el ámbito laboral mexicano. La falta de claridad sobre las remuneraciones no solo limitó la capacidad de negociación de miles de trabajadores, sino que también profundizó las brechas salariales entre hombres y mujeres. Hoy, esa opacidad está siendo cuestionada con una propuesta de reforma que podría hacer obligatorio publicar el rango salarial desde el inicio de un proceso de reclutamiento.
Visibilizar para corregir
La iniciativa legislativa busca modificar la Ley Federal del Trabajo para exigir que las vacantes incluyan un rango de salario concreto, en lugar de eufemismos como “sueldo competitivo” o “a convenir”. Esta medida se plantea como un paso hacia el cierre de una brecha salarial estimada entre 14 % y 18 % a favor de los hombres en México.
Transparencia como herramienta de cambio
Según estudios internacionales, solo una minoría de empleadores publica el salario en sus ofertas de trabajo. Esta falta de transparencia afecta especialmente a las mujeres, quienes carecen de información para negociar pagos justos. Publicar rangos salariales obliga a las empresas a revisar sus políticas internas y a responder de forma clara sobre su equidad retributiva.
Equidad y competitividad
La propuesta no solo plantea un beneficio directo para los trabajadores, sino que también aspira a mejorar la competitividad de las empresas. Al transparentar el salario, se reduce la rotación, se atrae talento de forma más eficiente y se fortalece la reputación corporativa. Si se aprueba, México podría marcar un hito para que la igualdad salarial deje de ser sólo un discurso y se convierta en una práctica real.
