Inversionistas presionan a cadenas de comida rápida a tener objetivos relacionados al agua
La coalición de inversionistas FAIRR y CERES están presionando al sector de restaurantes de comida rápida para cumplir con sus metas de sostenibilidad y, específicamente, establecer nuevos objetivos relacionados al uso del agua.
Entre las principales marcas de comida rápida que se les está pidiendo estas acciones se encuentran Chipotle Mexican Grill, Domino’s Pizza, McDonald’s, Burger King, Wendy’s, KFC, Pizza Hut y Taco Bell.
Estas empresas de comida rápida tienen una capitalización de mercado combinada de más de 280 mil millones de dólares y fueron contratadas por más de 90 inversionistas para establecer objetivos de reducción de emisiones y explorar formas de mejorar la calidad y la eficiencia del agua.
FAIRR ha confirmado que las seis empresas han aceptado los criterios de objetivos basados en la ciencia, y algunas ya han sido aprobadas por la iniciativa Science Based Targets (SBTi). Los objetivos se establecen en gran medida para 2050.
Sin embargo, los inversores han expresado su preocupación por la falta de acción sobre las emisiones de Alcance 3, dado que pueden representar el 90% de la huella de carbono total de una organización.
Como tal, los inversores están pidiendo a las organizaciones que presten más atención a las emisiones de la cadena de valor.
Cristina Figaredo, gerente sénior de investigación y compromiso de FAIRR, dijo: “Los reguladores y los marcos influyentes como el SBTi están endureciendo los requisitos para que el sector alimentario informe y actúe sobre el clima. Por lo tanto, a los inversionistas les preocupa mucho que los ambiciosos objetivos climáticos de las empresas de comida rápida no se traduzcan en acciones a lo largo de la cadena de suministro.
“La falta de alineación de las políticas de los proveedores con las ambiciones climáticas corporativas corre el riesgo de socavar los esfuerzos de estas marcas importantes para abordar el riesgo climático. Su desempeño en el agua también es alarmantemente bajo, y los esfuerzos para mitigar los riesgos relacionados con la escasez de agua y la contaminación se han estancado durante el último año”.
