Fincomún

30 Años Generando Confianza

En una economía como la mexicana, las micro, pequeñas y medianas empresas conforman su columna vertebral, siendo las principales fuentes de empleo y, por ende, de ingresos para las familias. De acuerdo con datos del INEGI, el 98 % de los establecimientos están en esta categoría, lo que nos da una clara idea de la importancia que tienen para el desarrollo económico del país.

Desde sus orígenes, Fincomún tuvo el firme compromiso de contribuir al bienestar para ayudar a los miles de comercios que nacieron de un sueño y de la necesidad de salir adelante, de construir un patrimonio y un mejor futuro. Así, a lo largo de 30 años ha entregado más de 3 millones de créditos que se convirtieron en oportunidades de tener una mejor calidad de vida.

La digitalización, indispensable para llegar a más clientes

Fincomún está viviendo una profunda y acelerada transformación digital, que está redefiniendo la manera en que se relaciona con sus clientes. En este nuevo enfoque, la tecnología ha tomado un papel central, permitiendo ofrecer soluciones innovadoras y adaptadas a sus necesidades.

Con estos 30 años, una de las grandes innovaciones es la implementación de un modelo que les lleva los servicios financieros donde quiera que estén y sin la necesidad de trasladarse a una sucursal, lo que les ahorra muchos recursos y tiempo que permite que los clientes se dediquen más a su negocio.

Con la App FCil, pueden, de manera sencilla y rápida, acceder a una amplia gama de productos: desde la solicitud de créditos y la apertura de cuentas de ahorro e inversión, hasta la gestión de un crédito, además de pagar sus servicios sin importar dónde se encuentren.

Con estas facilidades más una propuesta de valor muy competitiva, un servicio de clase mundial otorgado por gente altamente talentosa, Fincomún reafirma su compromiso de estar más cerca de sus clientes, brindando alternativas accesibles y eficientes en cualquier lugar y en cualquier momento, en todo el país, acercando a las familias mexicanas servicios financieros de calidad y mantenerse como una empresa plenamente humana, socialmente responsable y altamente productiva, contribuyendo así a una mayor inclusión financiera y al desarrollo de nuestro querido México.

Fincomún la primera SOFIPO en México

En 1994 se abrió la primera sucursal en Iztapalapa, la alcaldía más poblada de la Ciudad de México, y en la que los comercios son una de las actividades productivas más importantes y de la cual se mantienen miles de familias. En un inicio, a través de Fundación San Diego, realizaban acciones de responsabilidad social en la demarcación y ahí fue que se detectó que la población requería de acceder a servicios financieros a la medida de sus necesidades y que era difícil hacerlo a través de la banca tradicional.

En 2006, con la aprobación de la Ley de Ahorro y Crédito Popular, se convirtió en la primera Sociedad Financiera Popular (SOFIPO), licencia que los autoriza a ofrecer ahorro, crédito y seguros.

En 2019 también fue pionera en implementar CoDi, el sistema avalado por Banco de México que permite a los comercios aceptar pagos sin comisiones, como si tuvieran una terminal bancaria.

Con los objetivos claros logró expandirse a otros estados, para continuar generando confianza mutua con sus clientes ya que, al carecer de comprobantes de ingreso, su única garantía era su palabra, lo que para Fincomún fue suficiente y eso fue altamente valorado por quienes se sintieron atendidos y escuchados, reflejándose en la recomendación de boca en boca que abonó al crecimiento de la institución.

Fincomún reafirma su compromiso social a través de la Sostenibilidad

A lo largo de su historia, Fincomún ha sido un referente en la búsqueda del bien común, alineado a esto, la sostenibilidad se convierte hoy en una de sus prioridades estratégicas dictadas desde sus más altos órganos de gobierno, con lo que busca trascender dando cumplimiento a su propósito: trabajar por el desarrollo y crecimiento de sus clientes y sus familias, brindando soluciones financieras que permitan mejorar su calidad de vida. 

Se han hecho esfuerzos para integrar a su filosofía los criterios ASG (Ambiental, Social y de Gobernanza), apuntalando con ello sus prácticas sostenibles y enfatizando así, el compromiso de la institución por la dignidad de las personas.

Su estrategia de sostenibilidad se basa en 5 pilares:

•  Cuidar a sus clientes proporcionando soluciones financieras eficientes y seguras.

•  Diseñar productos que permitan la inclusión financiera.

•  Fortalecer sus órganos de gobierno e impulsar iniciativas cuidando, entre otros puntos, la ética, el cumplimiento normativo, la transparencia, la anticorrupción, la gestión de riesgos y el

desempeño económico del negocio.

•  Cuidar de su personal.

•  Lograr una operación de bajo impacto ambiental, que vaya de la mano de la productividad y permita satisfacer las necesidades de sus clientes.

Conscientes de que es fundamental impulsar el cuidado y la preservación del medio ambiente, han realizado una transformación digital, que les permite cambiar la forma en que habían estado operando, desarrollando una infraestructura que les permite acercarse más a sus clientes sin necesidad de que estos se desplacen, además de reducir drásticamente el consumo de papel y optimizando espacios que se traduce en un menor consumo energético y de agua.

Con esto, la empresa se convierte de nuevo en referente dentro de su segmento al implementar las mejores prácticas internacionales y estándares GRI, SASB y las NIS, como indicadores que les permiten medir y mejorar estos esfuerzos.

Así, Fincomún celebra estos 30 años con la convicción de seguir siendo una de las principales instituciones financieras del país, con gran fortaleza financiera y trabajando para seguir creciendo y llegar a cada vez más familias, generando confianza y bienestar a sus clientes y manteniéndose cerca de ellos a través de soluciones innovadoras.

“Hemos construido con hechos un mejor futuro financiero para miles de personas y así, nos hemos ganado su confianza”

David Romero, Director General de Fincomún