El león africano es otra víctima del cambio climático y la actividad humana
La población global de leones ha caído estrepitosamente en los últimos tiempos, como ha ocurrido con muchas otras especies de animales. En el marco de Día Internacional del León, celebrado el 10 de agosto, consideramos importante revisar su estatus en el mundo.
Según National Geographic, por cada león en libertad, hay 14 elefantes africanos, y hay 15 gorilas occidentales de llanura. También hay más rinocerontes que leones.
Hoy, 10 de agosto, queremos repasar la situación de estos animales.
Históricamente, el león tenía presencia en casi todo el continente africano. Ahora, vive en un territorio de poco más de un millón de kilómetros cuadrados.
La población global de leones en estado salvaje, no supera los 25,000 ejemplares en África. Como es de suponer, es una especie considerada vulnerable a la extinción por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza
Como dato curioso, la organización sin ánimo de lucro Wildlife Conservation Network (WCN) señala, que el número de leones se ha reducido a la mitad desde el estreno de El Rey León en los cines en 1994.
“Los leones son uno de los iconos universales del mundo, y están desapareciendo silenciosamente”, dice Paul Thomson, director de programas de conservación de la WCN.
“Ahora es el momento de detener la pérdida y devolver los leones a los paisajes de todo el continente”, añade.
En África, muchas presas han desaparecido producto del cambio climático que afecta los ecosistemas. Este descontrol en la cadena alimenticia ha provocado que los leones se alimenten del ganado de comunidades humanas cerca de sus territorios, como represalia, los campesinos asesinan a los felinos.
El descontrol en el hábitat de los leones provoca que la situación se complique para poder aparearse, aumentar sus mandas o que se generen nuevas.
National Geographic, apunta que la caza furtiva también supone una amenaza. La piel, los dientes, las patas y las garras se utilizan en los rituales tradicionales y en la medicina, y también hay un mercado creciente de partes de león en Asia.
“Si queremos que los leones existan dentro de 50 años de forma significativa, tenemos que ajustar los costes y los beneficios para que una parte mucho mayor se produzca a nivel local y los costes se asuman a nivel internacional”, afirma Amy Dickman, investigadora de National Geographic .