Equidad de género: ¿Qué es y cuáles son sus objetivos?
Aunque en el último siglo la lucha por la igualdad de las mujeres ha alcanzado grandes progresos, este tema sigue siendo un problema en muchas partes del mundo.
Este artículo explora el estado actual de la igualdad de género y lo que hay que hacer para lograr un verdadero cambio.
¿Qué es la igualdad de género?
La igualdad de género es la igualdad de derechos, responsabilidades y oportunidades de mujeres y hombres y de niñas y niños. La igualdad no significa que las mujeres y los hombres sean iguales, sino que tienen el mismo valor y capacidades por lo que merecen ser tratados por igual en todos los aspectos cotidianos.
La igualdad entre mujeres y hombres es un derecho humano fundamental. Está consagrada en la Declaración Universal de los Derechos Humanos y en muchos tratados internacionales y regionales de derechos humanos. A pesar de ello, la desigualdad de género persiste en todo el mundo. Las mujeres suelen tener menos poder que los hombres, cobran menos por un trabajo de igual valor y suelen tener menos oportunidades de acceder a la educación, la atención sanitaria y otros servicios básicos.
La igualdad de género es esencial para lograr un desarrollo sostenible. Es un requisito previo para la paz, la seguridad y la cohesión social. El empoderamiento de las mujeres y niñas se ha convertido en pieza clave para lograr una mayor eficiencia en el uso de los recursos.
En los últimos años se han producido algunos avances hacia la igualdad de género. La proporción de escaños ocupados por mujeres en los parlamentos nacionales e internacionales ha aumentado del 11,3% en 1995 al 23,7% en 2020. La brecha salarial media global entre mujeres y hombres también se ha reducido ligeramente, del 24% en 1995 al 22% en 2019.
Los diferentes tipos de igualdad de género
Hay diferentes tipos de igualdad de género, y cada uno es importante a su manera. A continuación, presentamos algunos de los tipos de igualdad de género más importantes:
1. Igualdad salarial entre hombres y mujeres: Este es quizás el tipo de igualdad de género más conocido, y también uno de los más importantes. Los hombres y las mujeres deben recibir el mismo salario por hacer el mismo trabajo, independientemente de su sexo.
2. Igualdad de acceso a la educación: Las mujeres deben tener las mismas oportunidades que los hombres en materia de educación. Deben poder asistir a las mismas escuelas y tener las mismas oportunidades de aprender y crecer intelectualmente.
3. Igualdad de acceso a la sanidad: Las mujeres deben tener el mismo acceso a la sanidad que los hombres. Deben poder ver a los mismos médicos, recibir los mismos tratamientos y tener el mismo nivel de atención.
4. Igualdad de derechos: Hombres y mujeres deben tener los mismos derechos ante la ley. Deben ser tratados por igual en todos los asuntos legales, incluyendo el matrimonio, el divorcio, la custodia de los hijos y la propiedad.
5. Igualdad de representación: Los hombres y las mujeres deben estar igualmente representados en todos los ámbitos de la sociedad, incluidos el gobierno, las empresas, los medios de comunicación y otros campos.
Los diferentes tipos de desigualdad de género
Hay muchos tipos diferentes de desigualdad de género en el mundo. Existen países que tienen leyes que discriminan a las mujeres, impidiéndoles tener propiedades, recibir educación o trabajar fuera del hogar. En algunos países, las mujeres se enfrentan a barreras culturales que dificultan su plena participación en la sociedad.
La desigualdad de género también puede adoptar formas más sutiles. Las mujeres pueden cobrar menos que los hombres por hacer el mismo trabajo, o se puede esperar que hagan la mayor parte de las tareas domésticas aunque también trabajen fuera de casa. Estas disparidades pueden acumularse a lo largo del tiempo, dificultando que las mujeres alcancen la seguridad económica y la igualdad social.
A pesar de los retos, hay signos de progreso en la lucha por la igualdad de género. Cada vez son más los países que ratifican los tratados internacionales que protegen los derechos de las mujeres, y cada vez son más las empresas que aplican políticas que promueven la igualdad, la diversidad y la inclusión. A medida que aumenta la concienciación sobre la importancia de la igualdad de género, podemos esperar ver aún más progresos en los próximos años.
¿Dónde está más extendida la desigualdad de género en el mundo?
Hay muchos lugares en el mundo donde la desigualdad de género sigue siendo un problema muy real. En algunos países, a las mujeres no se les permite tener propiedades, trabajar o incluso salir de casa sin el permiso de un familiar masculino. En otros, a las niñas se les impide la continuidad de sus estudios a una edad temprana para casarlas o venderlas como esclavas sexuales.
Son muchos los factores que contribuyen a la desigualdad de género. Uno de los más frecuentes son las normas y tradiciones culturales. En muchas culturas, las mujeres son consideradas inferiores a los hombres y no tienen las mismas oportunidades ni el mismo respeto. Esto se remonta a la antigüedad, cuando las mujeres eran consideradas propiedad de sus padres o maridos y no se les permitía tener posesiones ni tomar decisiones sobre sus propias vidas.
Actualmente, existen organizaciones y personas que trabajan para promover la igualdad de género en todo el mundo. A través de campañas de educación y concienciación, para cambiar las actitudes y derribar las barreras que impiden a las mujeres desarrollar todo su potencial.
¿Cómo podemos lograr la igualdad de género?
La principal, es cambiar la forma de pensar sobre el propio género y avanzar hacia una sociedad más inclusiva e igualitaria. Brindar las mismas oportunidades de educación y empleo para todos, (independientemente de su identidad de género). Impulsar la creación y aplicación de leyes y políticas que protejan a las personas de la discriminación por su identidad de género.
Igualdad de género en el lugar de trabajo
No cabe duda de que la igualdad de género es una cuestión importante en el lugar de trabajo. Al fin y al cabo, las mujeres constituyen la mitad de la mano de obra y merecen ser tratadas en igualdad de condiciones que sus homólogos masculinos. Pero, ¿qué significa realmente la igualdad de género en el lugar de trabajo?
Como ya lo mencionamos anteriormente, las mujeres y los hombres deben tener las mismas oportunidades de triunfar en el trabajo. Esto incluye recibir las mismas remuneraciones por realizar el mismo trabajo; ser consideradas para ascensos y puestos de liderazgo; y, tener acceso a las mismas oportunidades de formación y desarrollo.
También significa crear un entorno de trabajo en el que todos se sientan cómodos y respetados, independientemente de su identidad o expresión de género. Esto va desde garantizar instalaciones adecuadas para el uso de todos los empleados, proporcionar códigos de vestimenta no sexistas hasta utilizar un lenguaje inclusivo en las comunicaciones del lugar de trabajo.
Por último, la igualdad de género en el lugar de trabajo también significa apoyar a los empleados que deciden tener familia. Esto incluye ofrecer acuerdos de trabajo flexibles, ayudas para el cuidado de los hijos y permisos parentales pagados.
Actualmente, avanzar hacia la igualdad de género en el lugar de trabajo es bueno para las empresas: ayuda a atraer y retener a los mejores talentos, aumenta la moral y la productividad, y promueve una imagen corporativa más positiva. También es lo correcto: todo el mundo merece un trato justo y respetuoso en el trabajo.
Igualdad de género en el hogar
No hay una respuesta única a la pregunta de cómo lograr la igualdad de género en el mundo. Sin embargo, es importante que desde el hogar y la familia se fomente la igualdad, un entorno en el que todos sean tratados con justicia y respeto, independientemente de su sexo, compartir las responsabilidades y labores domésticas por igual entre todos los miembros de una familia, son algunas medidas que garantizan la creación de un mundo más igualitario para todos.
