Unilever es la empresa líder más ecoamigable
En enero del año pasado Paul Polman, CEO de Unilever desde 2009, lideró la Comisión Global para Negocios y el Desarrollo Sostenible del Foro Económico Mundial (WEF), donde se definieron nuevos modelos de negocio, con un enfoque sostenible, pensado más en el mundo y las comunidades que en los resultados financieros. Los temas que Polman llevó a la mesa fueron el uso eficiente del agua, el impacto de los negocios en el medio ambiente y el aporte de las empresas privadas para combatir la pobreza, la desnutrición y la inequidad.
A diferencia de muchos empresarios que recién se involucran con estos desafíos, Polman lleva años enfocado en resolver esas interrogantes. Incluso, desde Unilever, se ha preocupado por desarrollar productos que contribuyan con estos retos de la humanidad, como el jabón Lifebuoy, que se enfoca en prevenir enfermedades infecciosas mediante el lavado de manos, pensado en las familias que viven en zonas de extrema pobreza, o Dove, que empodera a las mujeres sin importar su belleza, rompiendo todos los estereotipos.
Lo más interesante, sobre todo para los accionistas, es que estas marcas no solo figuran entre las más sostenibles sino también entre las más rentables. Su trayectoria en el mundo del consumo masivo empezó hace 35 años. Su escuela fue Procter and Gamble (P&G), donde estuvo 27 años y luego tres en Nestlé. Con Polman, la estrategia de Unilever ha sido clara: bajo su batuta la empresa se embarcó en lo que él denominó el Plan de Vida Sostenible Unilever.
Su meta: duplicar el volumen de sus negocios pero al mismo tiempo reducir su huella ambiental.
La estrategia de Polman en Unilever no se ha basado solo en generar impacto positivo en el mundo, sino en sacarle el máximo provecho a la imagen verde de la compañía, clave a la hora de retener a los trabajadores millennials. “Todos podemos ser campeones de la tierra. Son las pequeñas acciones, multiplicadas por todos nosotros, las que realmente van a hacer la diferencia. Debemos desafiar nuestras prácticas actuales y direccionarlas a luchar contra la pobreza, la desigualdad y los desafíos ambientales”, dice Paul Polman, el campeón de la tierra Nº 1.