Más de la mitad de México enfrenta sequía en aumento

El problema de la escasez de agua en México continúa en ascenso, afectando a más del 55% del territorio nacional, según el Monitor de Sequía del Servicio Meteorológico Nacional (SMN). En las últimas dos semanas, la superficie afectada por la falta de lluvias ha aumentado, y aunque aún no se alcanzan los niveles críticos de 2024—cuando el 75.4% del país estuvo bajo condiciones de sequía—las proyecciones indican un panorama preocupante.
Estados más afectados y riesgo en el abastecimiento de agua
Las regiones más impactadas incluyen Sonora, Chihuahua, Durango y Sinaloa, donde la sequía severa y excepcional pone en riesgo el suministro de agua para uso doméstico, agrícola e industrial. En Sinaloa, las presas agrícolas operan con solo el 12.2% de su capacidad, mientras que en Sonora se encuentran por debajo del 15%, lo que amenaza la producción de cultivos clave como maíz, frijol y trigo.
A pesar de algunas lluvias recientes en estados como Tlaxcala, Puebla y Veracruz, la cantidad de precipitación ha sido insuficiente para revertir el impacto de la sequía. De continuar esta tendencia, la escasez de agua podría intensificarse en los próximos meses.
Factores climáticos y pronóstico a futuro
El fenómeno de El Niño y el aumento de temperaturas están acelerando la evaporación de los cuerpos de agua, reduciendo aún más la disponibilidad del recurso. Aunque los frentes fríos han provocado lluvias en algunas zonas, no han sido suficientes para compensar la sequía generalizada. Los expertos del SMN advierten que la situación podría agravarse en 2025 si no se presentan lluvias significativas en las regiones más afectadas.
Medidas urgentes para mitigar la crisis
Frente a este escenario, es esencial que las autoridades y el sector privado implementen estrategias de gestión del agua que incluyan:
- Mayor inversión en infraestructura hídrica, con proyectos de captación de agua pluvial.
- Uso eficiente del agua en la agricultura, promoviendo sistemas de riego más sostenibles.
- Campañas de concientización para reducir el desperdicio de agua en la población.
La sequía en México representa un desafío creciente que requiere soluciones inmediatas. Sin una estrategia de mitigación efectiva, el acceso al agua para millones de personas y sectores clave de la economía podría estar en riesgo en los próximos años.