Bitcoin

Luis E. Montoya Fernández*

Desde el 2009 esta moneda virtual ha incrementado su valor en más de 6,000% anual; para muchos se traduce en un aumento no sustentado, es decir en nada tangible o cuantificable, lo que muchos en el sistema financiero llamaríamos una burbuja especulativa. Una burbuja especulativa se da por el aumento en el precio de algún bien que no tiene fundamentos, generado por la demanda excesiva que existe en el activo. Por lo tanto, podría ser que en el corto plazo bajara dramáticamente hasta llegar a niveles en donde el Mercado lo percibe como correctamente valuado.

Esta moneda es criptográfica, creada por algoritmos que son generados por una computadora y que codifican una serie de transacciones cifradas, que a su vez otros computadores replican para que las transacciones sean confiables (blockchain), su creador sostiene que es una forma muy segura de realizar una transferencia ya que todas las computadoras enlazadas registran estas operaciones dando certeza de que un Bitcoin pasó de manos de una persona a otra. Este algoritmo fue creado por Satoshi Nakamoto en el año 2009 luego de la gran burbuja en el mercado inmobiliario en los Estados Unidos que generó una gran recesión y de la que apenas se están recuperando.

Recientemente se dio a conocer en una entrevista para la BBC que el verdadero creador del bitcoin fue Craig Wright un empresario y científico computacional australiano, aún existen dudas sobre el verdadero creador de esta moneda, aunque muchas personas han mostrado evidencias de que Craig es el verdadero creador.

Este algoritmo tiene un número finito de Bitcoins que puede estar en circulación y que se espera se puedan alcanzar para el año 2140. Actualmente existen poco más de 16,000 millones de Bitcoins circulando en el globo de los 21,000 millones disponibles que puede generar dicho algoritmo y que llegada esta cifra solo se podrán realizar transacciones y funcionar como método de pago seguro.

¿Para qué fueron creadas?

Las instituciones financieras son quienes controlan en la actualidad la mayoría de las transacciones sin efectivo (transferencias electrónicas) y son beneficiadas cuantiosamente por las comisiones que genera dicha actividad, lo que el Bitcoin pretende es realizar pagos de un ente a otro sin necesidad de un tercero, haciéndolas más seguras y a un costo reducido. Las monedas virtuales fungen ya como método de pago, el problema es que no están respaldados por ningún ente regulador y su precio esta fincado en la oferta y demanda que exista, lo que para muchos lo hace una moneda riesgosa al no estar respaldada por una entidad en cuanto a su liquidación, transparencia y fundamentales, por el contrario, como en el caso del peso mexicano que es regulado por un banco central el cual da certidumbre de su valor intrínseco.

Hoy en día el Bitcoin se ha convertido en un instrumento que se utiliza principalmente para especulación (compra y venta para poder obtener un rendimiento de estas transacciones), lo cual la hace muy volátil, es decir en un solo día se puede ganar o perder valor. Desde su creación esta moneda ha logrado su máximo histórico de 19,511 USD por Bitcoin, cuando en su creación hace ocho años un Bitcoin podía ser comprado por 50 USD, esto no es un rendimiento menor, ya que estamos hablando de alrededor de 350 veces la inversión inicial.

El temor de muchos especialistas y ahora bancos centrales que hasta el año pasado no reconocían a esta moneda, empiezan a dar sus posturas en torno a las monedas virtuales ya que la cantidad de dinero que está puesta en este activo es grande, sin mencionar que desde diciembre de 2017 ya existen derivados sobre el Bitcoin en uno de los principales mercados de derivados en el mundo “Chicago Mercantile Exchange” (instrumentos financieros que adquieren valor al estar vinculado al precio del subyacente).

Aunado a esto en los últimos años las criptomonedas han estado involucradas en actividades no lícitas, ya que al no estar centralizadas por una institución no se puede rastrear el intercambio de éstas.

Desde 2014 el Banco de México advirtió al público de los riesgos del uso de estos activos virtuales que no son considerados como moneda de uso legal sino como activos de almacenamiento e intercambio de información electrónica sin respaldo de alguna institución. Hasta el momento no ha emitido regulación alguna para el uso de éstos, sin embargo, ha mencionado en repetidas ocasiones que si llegase a representar un riesgo mayor para el sistema financiero y sistema de pagos tomará medidas correctivas.

Las monedas virtuales fungen ya como método de pago, el problema es que no estarán respaldados por ningún ente regulador y su precio esta fincado en la oferta y demanda que exista.

Hacia dónde va…

En el último año se ha hablado mucho del impacto ambiental que se está generando al hacer minería sobre el Bitcoin ya que la cantidad de energía que se necesita para las computadoras que replican los algoritmos es importante, lo cual hizo que China prohibiera la minería de estas monedas dándole un golpe fuerte a su valor. En las últimas semanas China y Corea del Sur han impuesto regulaciones importantes contra el uso de estas monedas por el impacto que ha tenido en negocios ilícitos. Sin embargo, la euforia por esta moneda y las plataformas que logran el intercambio de estas monedas siguen en crecimiento, así como el apetito de nuevos y viejos inversionistas en realizar transacciones en torno a las monedas virtuales.

Luis E. Montoya Fernández, Licenciatura en Dirección Financiera por el ITAM